3rd of June – Into the heart of the Tatra Mountains

229,46km Krakow – Banska Bystrica

I´m simply exhausted, so today I’m not going to write much, but there are some things that should be mentioned. I was riding in the mountains all day, and at the end I was just focusing on not quitting. I had temptations to put my tent in the forest, but I had already talked to my next host, so I kept going.

I left Krakow a bit later than I planned, but still quite early. My friend made me some sandwiches, which ended up being really good, and I left. Today I basically followed the main road, at least the parts where bikes where allowed. At the beginning there were not many cars and the road was great, in some downhill I went 70 km/h (ok, it was 69,98). And when there was another road on the side I always took it.

I almost didn´t stop till I got to the border with Slovakia, and then is when some problems occurred. First I stopped for water, and it´s the first restaurant where they didn´t give me, they didn´t even let me fill the bottles in the toilet. But in the next bar they gave me, and I didn´t go thirsty.

I took the bike and I heard that the fender was touching the tire. I checked, and this time the rack was completely broken, so I had to ride around 5 km holding my bags to the side with one hand, till the next village. Luckily there was a bike shop, and they put me a new rack. It was 20 euros, less than expected, and I like it more than the previous one. It looks tougher and the bags go more back, so I don´t need to put the straps for the panniers, not to touch my feet.

Also the handlebar bag got pretty destroyed, now every time there is a hole on the road I have to hold it, not to fly away. I really need to fix it or buy a new one; I hope it holds till Budapest.

There weren´t any more incidents. But going up and down the mountains was extremely tiring. It´s true that the landscape was really beautiful, but after a while I didn´t even enjoy it, I just wanted to arrive to Banska Bystrica. It rained a bit, but I took cover, and I didn´t get wet at all. It´s just this summer storms that I’m experiencing the last few days.

Around the 200 km I was ready to stop and put my tent. I could not reach my host so I was seriously looking for a place to camp. I had been going more than 10 km uphill, I thought I couldn´t go any further. I stopped and rested for a while, and I finally talked to my host, and set a meeting place. I kept going and in less than a km it was downhill, almost 25 km of downhill!! I was not tired anymore, that’s the magical thing about bikes, and I did the remaining distance in 45 minutes, so fast, it felt great.

Once in the town I met my host and we went to get a pizza to a place owned by a friend. Afterwards, instead of going to his house we went to another friend´s, because it was closer, and more in my way to keep going tomorrow. They are very nice, I really appreciate their consideration. There I tried to stay a bit with them and drink a beer, but I couldn´t stay awake.

Now I think it was not such a great idea to try to cross Slovakia through the Tatra in 2 days. Tomorrow I have less than 160 km. I really hope I didn´t get too tired today, and I can enjoy the way.

A church in the Polish Tatra.

Una iglesia en la parte polaca de los Tatra.

The Slovakian border.

La frontera eslovaca.

The Slovakian Tatra.

Tatra de Eslovaquia.

A Slovakian village.

Un pueblo eslovaco.

3 de Junio – Hacia el centro de las Montañas Tatra

229,46km Krakow – Banska Bystrica

Estoy simplemente exhausto, así que hoy no voy a escribir mucho, pero hay un par de cosas que debería contar. He estado pedaleando en las montañas todo el día, y al final solo estaba centrado en seguir. Me ha tentado poner la tienda en el bosque, pero ya había hablado con mi nuevo anfitrión, así que he seguido.

He dejado Cracovia un poco más tarde de lo que había planeado, pero aun así bastante pronto. Mi amiga me ha hecho unos sándwiches, que estaban muy ricos, y me he marchado. Hoy he seguido las carreteras principales casi todo el día, por lo menos cuando podía. Al principio no había muchos coches y la carretera estaba bien, en algunas cuestas abajo he ido a 70km/h (vale, en realidad 69,98). Y cuando había una carretera más pequeña, la intentaba coger.

Casi no he parado hasta la frontera, hasta Eslovaquia, y ahí ha sido cuando he tenido un par de problemas. Primero he parado a coger agua, y en el primer restaurante no me la han dado, ni siquiera me han dejado rellenar las botellas en el baño. Pero en el siguiente bar sí que la he conseguido, así que no he pasado sed.

Cuando he vuelto a coger la bici me he dado cuenta que el guardabarros tocaba la rueda. He mirado, y he descubierto que el portamaletas estaba completamente roto. Entonces he tenido que ir unos 5 km sujetando las alforjas con una mano. Por suerte en el siguiente pueblo he podido cambiar la pieza rota. Me ha costado 20 euros, menos de los que esperaba, y me gusta más que el anterior. Parece más duro y las alforjas van más atrás, por lo que ya no necesito las correas.

También la bolsa del manillar se ha soltado, por lo que cada vez que hay un bache tengo que sujetarla para que no se caiga. Tengo que arreglarlo o comprar una nueva, espero que aguante hasta Budapest.

Luego no ha habido más incidentes. Pero ir cuesta arriba y cuesta abajo todo el día ha sido muy duro. El paisaje era increíble, pero al final ya no lo estaba disfrutando, solo quería llegar a Banska Bystrica. Me ha llovido un rato, pero me he resguardado, y no me he mojado nada. Solo ha sido una de estas tormentas de verano que he sufrido los últimos días.

Alrededor del kilometro 200 ya estaba dispuesto a poner la tienda de campaña. No podía contactar con mi anfitrión, por lo que he empezado a buscar algún sitio apropiado. Llevaba 10 km cuesta arriba y pensaba que ya no podía más. He parado a descansar y por fin he podido hablar con el que me aloja y hemos quedado. He seguido, y en menos de un km ha empezado la cuesta abajo, ¡¡casi 25 km de cuesta abajo!! Y ya no estaba tan cansado, es lo increíble de las bicis, y he hecho lo que me quedaba en 45 minutos, tan rápido, me ha sentado muy bien.

Una vez en el pueblo he conocido a mi anfitrión y hemos ido a tomar una pizza al local de un amigo suyo. Después, en vez de ir a su casa, hemos venido a casa de otro amigo suyo, ya que está más cerca y de camino para mañana. Son muy majos y aprecio su consideración. He intentado estar con ellos un rato y tomar una cerveza, pero no me podía mantener despierto.

Ahora creo que no ha sido tan buena idea intentar cruzar Eslovaquia a través de los Tatra en dos días. Mañana tengo menos de 160km. Espero que no me haya cansado demasiado hoy y pueda disfrutar del camino.